DE COMPRAS

El colectivo de comerciantes de Carmona se queja constantemente porque los vecinos de esta santa ciudad nos vamos fuera a hacer nuestras compras.

Claro, quejarse es fácil, pero poner remedio a esta situación ya no lo es tanto y como en la cultura latina prima aquello de la Ley del Mínimo Esfuerzo pues nada a quejarnos y a despotricar de todo aquel que compre fuera de "nuestras fronteras".

Pero claro, cuando se les argumenta se quedan callados sin saber ue decir o lanzando balones fuera...Pongamos un ejmplo vivido hoy mismo.

El niño (mi hijo) es forofo de la Play 3 (PS3, Play Station 3, etc, etc) y claro con los dinerillos que va pillando (un cumplaños or aquí, un santo por allí...) pues se va comprando sus caprichillos relacionados, claro está, con la dichosa consolita del demonio.

El caso es que con esto de jugar online, todos (o casi todos) sus amigo (virtuales se entiende) tienen unos auriculares específicos para usarlos con esta consola y así poder hablar a la vez que se acribillan a balazos unos a otros, y como no puede ser de otra forma, mi pupilo quiere "invertir" algún dinerillo en este artilugio. Vale le digo, dame el dinero que tengo que salir y te lo busco por Carmona....craso error el mio. Esperanzado en los comerciantes de la ciudad he ido a preguntar en tres sitios diferentes y en ninguno tienen nada que se les parezca. De hecho a alguno parece incluso que les hablo de brujería.

Lógicamente solo me queda la opción de salir de puntillas de Carmona, sin que nadie me vea a ir a comprarlo a alguna gran superficie lejos de nuestras fronteras como puede ser en Sevilla o Alcalá de Guadaira.

Lo curiosos del caso es que en alguna ocasión estos mismos comerciantes tratan de justificarse por la falta de productos alegando que mantener el stock les supone un desembolso que no pueden asumir y claro, mantener un stock de 4 o 5 micrófonos que valen del orden de 25 euros cada uno es un gasto tremendo...estamos hablando de una inversión de 100 - 200 euros...que creo que para un negocio no es un disparate. Quizás sea más disparatado que pierdan una venta y un posible futuro cliente, porque claro, si ya me han fallado en esta tontería después de llevarme una hora dando vueltas, la próxima vez me iré directamente fuera de Carmona a buscar lo que necesito.

Lo dicho, protestemos y pongámonos en contra de un centro comercial en Carmona, eso si, todos los que protestan con la tarjeta del Corte Inglés y de Carrefour en la cartera...